Nos guste o no, los vídeos son las formas de contenido que más están creciendo entre los usuarios de Internet. Según datos de comScore sólo en EEUU se vieron más de 5.1 billones de vídeos en el mes pasado. Con tanto vídeo que se consume online, el propietario de una tienda online debería preguntarse si este medio le ayudaría a convertir visitantes en clientes. Por norma general, y según un estudio de RealSeo, sí. Pero ¿cuáles son los motivos de estas conversiones? Podemos determinar cuatro:
1. El vídeo proporciona a los compradores más información de producto: es obvio que la imagen en movimiento ofrece mucha más información al potencial comprador que una foto o un texto. En un vídeo el usuario tiene más detalles del producto que está a punto de adquirir, además de que puede incluir un componente emocional que no se aprecia en las fotos.
2. El vídeo construye una relación con los clientes: la afinidad con la marca se puede obtener mediante vídeos de entretenimiento o de información, que ‘comprometan’ a los consumidores con los productos que se ofrecen en la tienda online. El vídeo para hacer ‘branding’ es una de las herramientas más efectivas.
3. El vídeo está considerado ‘contenido de calidad’: para el SEO, los vídeos son contenido de calidad, dada la tendencia del consumo de multimedia que cada día va a más. Además, generar vídeos cada poco tiempo prácticamente garantiza una posición más que aceptable en los resultados de búsqueda.
4. El vídeo es fácil de compartir: por último una de las características más importantes del vídeo es que es facilísimo de compartir en las redes sociales, entre amigos y compañeros, y por ellos es mucho más viral. Un vídeo útil, gracioso o emotivo de nuestra empresa puede acabar incluido en blogs o páginas que se escapen de nuestro control.
Con estas cuatro ventajas ya son suficientes motivos de peso para no olvidar el vídeo en las tiendas virtuales.